viernes, 12 de abril de 2013

El orientalismo Saidiano





Hacia 1978 Edward Wadie Said (1935-2003) pública la que sería su obra más representativa, Orientalismo y con ella una revolución del pensamiento occidental hacia la vida oriental. Desde luego, tal y como lo señala Manuel Sánchez Matito “el objetivo principal de su libro consistía en mostrar cómo a lo largo de varios siglos el conocimiento que habían desarrollado la mayoría de los expertos europeos del mundo oriental había contribuido a crear una imagen cerrada y rígida que, a su vez, había propiciado la dominación militar, cultural, social o económica por parte de las mismas potencias de las que procedían los brillantes intelectuales”. Este punto de vista junto con la que provee Juan Ignacio Castien Maestro en cuanto a cómo eran vistos los orientales nos dan un campo de vista más amplio sobre la importancia de Said: “La asunción de la perspectiva orientalista por parte de estos ‘orientales’ no resulta en sí excesivamente difícil de explicar. Quien vive dominado tiende a interiorizar el punto de vista de quien le domina. Es lo que ha ocurrido siempre con todos los dominados, con las mujeres con respecto a los hombres, con los pobres frente a los ricos y con los colonizados en relación con los colonizadores. No es difícil entender el por qué. El dominado se encuentra siempre con que es otro el que habla por él”.

Me parece que estas dos referencias dan en el punto clave de la obra de Said. El orientalismo se devela como un campo a estudiar pero desde la perspectiva del mismo oriental, objetivamente. Se pretende renovar lo que muchos estudiosos vislumbraban, muy en su posición occidental. Y justamente cómo lo señala Castien Maestro, el occidental proporciona su visión particular y personal del otro; se habla de los otros plantándose en uno mismo como un ser diferente sin costumbres similares. De allí que Matito apunte que “Oriente es siempre lo contrario, el reverso de occidente y sus valores. Si Occidente es orden y claridad, Oriente representa, desde la Ilíada, la irracionalidad, la imposibilidad de articular por sí mismo su propia realidad”. Esto siempre visto por el otro. Asunto que abre la puerta a la polémica sobre el oriental. Vemos con esta que Said va instaurando las característica del postcolonialismo, que posterior a él tomar un auge importante en el estudio de la cultura.

Otro aspecto relevante es el hecho que genera esos puntos de vista sobre el orientalismo, es decir, con ello se va marcando las características definitorias del mismo occidental. Mientras se encargaban de ver al oriental como ese objeto de estudio, Said, enfoca su análisis tomando la postura que el occidental tiene de sí. Convergen, entonces, oriente y occidente, en un solo campo de estudio, la condición de su cultura; por lo cual, ambas se complementan.

En fin, estamos frente a un estudio que toma, desde mi óptica, como pretexto el orientalismo para ir develando al occidental.


Refencias:

Manuel Sánches Matito, “Una sinfonía binacional. La mirada de Edward Said hacia el conflicto palestino-israelí”, en http://serbal.pntic.mec.es/AParteRei/matito72.pdf

No hay comentarios:

Publicar un comentario